lunes, 21 de diciembre de 2009

Un típico post de padre


Pido disculpas por hacer un post “de padre” pero sucede que hay temitas que a uno le dan vueltas por la cabeza permanentemente y se activan al leer notas como ésta que sale hoy en Clarín y que refiere a cómo cambiaron los juegos cuando se compara la infancia de los padres con la de sus hijos. Los chicos –que pueden- ahora se refugian en la compu y la Play y se me disparan algunos pensamientos. Por ejemplo me pregunto qué hubiera hecho yo de haber tenido la Play y todos estos videojuegos de los que disfruta mi hijo.

En mi niñez lo único que había eran los flippers (así los llamábamos) esas maquinolas que te daban tres pelotitas por ficha y un partido de regalo por superar determinado puntaje o por embocar la bola en los famosos “When Light”.

Recuerdo, sí, que cuando en el Bar Español traían una máquina nueva nos la pasábamos metidos ahí sin ver la luz del día ¿Qué hubiéramos hecho de tener toda esta parafernalia de juegos de video que hoy tiene mi hijo?

La próxima vez que vaya a Tres Lomas chequearé en profundidad cuánto dedican los chicos de ahí a los juegos al aire libre y a la Play, seguro que siguen disfrutando y mucho del aire libre pero seguro también que está más “conectados” que lo que podíamos nosotros, que no teníamos ni siquiera TV en muchos casos (en casa llegó cuando tenía 13 años cumplidos)

Lo que sí es cierto es que ser niño en una ciudad como Buenos Aires supone un nivel de pérdida de libertad total. En los pueblos y ciudades chicas lo pibes aún pueden agarrar la bici y perderse en sus mundos de aventura. Mi Juan Manuel no lo puede hacer: tiene una bici comprada hace poco en la que sólo puede dar alguna que otra vuelta en la plaza, lo que de por sí es bastante poco copado.

Sufro por ver que mi hijo no tiene esa libertad de la que pude disfrutar hasta el empacho en mi niñez, pero al mismo tiempo lo envidio porque el tipo tiene juegos en la compu que son fascinantes, porque puede chamuyarse niñitas por el chat y porque tiene la posibilidad ilimitada de acceder vía Internet a un mundo nuevo y fascinante.

Es complejo el tema por eso no voy a entrar en esas temáticas trilladas en correos spam de viejos chotos que ensalzan los tiempos idos con esos típicos ¿Te acordás?

Los niños de ciudad tienen limitaciones, sí, pero también acceso a divertimentos que nosotros habríamos pagado fortunas por poseer.


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12 comentarios:

ada e ido dijo...

ah nosotros amamos la compus y sus selvas de informacion.
Con nuestro hijo tb hemos pasado horas jugando simples e increibles juego flash online.
La unica cosa que se echa en falta de una "era flipper", es lo corporal, eran maquinas que las tenias que hacer bailar, que te incitaban al movimiento.Estaba bueno eso.
Suponemos que la wii es el equivalente moderno de eso, pero son carisimas. Aunque pensandolo bien la play tb te permite un monton de monerias.
Como regalito: Suzanne ciani grabando los sonidos futuristas que hacia el flipper XENON

http://www.youtube.com/watch?v=yC8O5HPvfsg&feature=related

ram dijo...

Si nos ponemos nostalgiosos y miramos para el lado de los chiches tecnológicos hoy disponibles y para nosotros pura ciencia ficción (cuando éramos chicos), es para cortarse las venas con una chocolina filosa.
Ahora, sí creo que en algo, antes fue mejor, hablo del simple y sano ejercicio de leer. No solamente se jugaba más físicamente, también había una enorme circulación de revistas, libros - del traga al peor atorrante, todos leíamos.
No reniego de las muchas posibilidades actuales, pero sí creo que esas posibilidades también son un freno - un chico (y no tan chico) de ahora, me parece, es menos curioso, valora menos el saber, el entender y hay un acostumbramiento a las cosas pre-digeridas que, antes, tal vez uno era más inocentón pero también bastante menos crédulo.

Luis dijo...

Tanta inocencia analógica , tanto manual en donde Evita nos amaba, generó la incredulidad actual sobre las posibilidades revolucionarias de una parejita de ambiciosos millonarios.

Holden Caulfield dijo...

El tema es más complejo, creo. Hasta 1990, más o menos, eramos todos, mal que mal, hijos de la lectoescritura. A los seis años aprendías a leer y tenís ese habíto, en mayor o menor medida. No había Internet, ni MP3, ni MP4, no existían los CDs, y solo había 5 canales de aire, unos de los cuales, el 2, no se sintonizaba bien, y en enero del 89, la programación se redujo un 50 por ciento por la crisis energética.
Desde 1990, más o menos, no tenés hijos de la lectoescritura, sino del neoliberalismo y el auge tecnológico: MP3, MP4, Internet, 500 canales de cable, CDs, PlayStation, Sega, educación pauperizada, pérdida de valores, Tinelli, descrédito cada vez mayor en las clases dirigentes, el se todo igual, etc. La onda pasa por recuperar el valor de la lectoescritura, creo yo, integrando ello a un auge que no tiene vuelta atrás.

Anónimo dijo...

¿la edad mínima para sacar un usuario de facebook no es 13 años? después protestan por los peligros de la web

qcancionq dijo...

totalmente de acuerdo

ada e ido dijo...

El porcentaje de chic@s interesad@s en lecturas, ciencias, arte , debe seguir siendo el mismo que antes, cambio el soporte, y sobre todo la cantidad de info.
Tal vez por ello mismo los "personajes" estan mas desmitificados, pero eso no es necesariamente bueno ni malo.
los chicos ahora son menos curiosos???
Cuando eramos chicos, los verdaderamente curiosos eran 3 o 4, nomas.

vodka dijo...

mi hijo no es un niño, tiene 22, como muchos de los que leen este blog, pero recuerdo hermosos momentos jugando tirada en el piso con el en el Super Mario y haciendole el neskuik a el y a sus amigos... En un recital punk me dedicaron un saludo por el neskuik.
Y ademas hay ventajas educativas anexadas, por ej. el pibe se maneja barbaro con el ingles por usar la compu. Y lo feo es que se paso la infancia en el futbol infantil del club del barrio, y no jugando en potrero, Pero tambien sera una cosa de soportes...
el tiempo de uno es el que le toca vivir y la nostalgia es a veces una cosa pajera con que tramitamos mal el paso del tiempo. Salute a la barra.

Susana dijo...

Se sopecha que el uso muy temprano de las tecnologias traen problemas de apendizaje, pues trabajan con la parte superficial del cerebro. Los adolescentes no quieren pensar o razonar, hay resistencia de profundizar cualquier tema. El método de ellos se basa en la rapidez y superficialidad, en tomar varios temas a la vez pero sin profundizarlos.Hay informacion pero poca formacion. Los niños deben estar en la compu trabajando junto a los padres , nunca solos, pues los adultos pueden ayudar a que ellos reflexionen que estan haciendo o lleyendo. HEMOS ENTREGADO A NUESTROS HIJOS EN MANOS DE LAS NUEVAS TECNOLOGIAS( PC, TV, MP3-4, etc) , es una especie de abandono, autismo, estan conectados pero no comprometidos con el otro.
Los adolescentes viven en la apatía, quizas por que pueden tener todo a travez de las tecnologías y han APAGADO LA CREATIVIDAD que nosotros si teniamos, en nuestras supuestas carencias.

ada e ido dijo...

bueno,la superficialidad hoy en dia es algo my importante. La falta de profundidad a la antigua no es algo malo en si. Tal vez se esten adquiriendo nuevos mecanismos de aprehension del conocimiento empirico.
Mas alla de eso, en las universidades , en las calles en las artes se sigue aprendiendo y creando.
Pero volviendo a lo mismo, tan maravillloso y creativo era el pasado?

Eva Row dijo...

Gerardo,
vos hablás así porque naciste en un pueblo, yo nací en Chacarita, y como soy mujer, no jugaba al fútbol en el potrero como mis hermanos, y me aburría enormemente jugando con mis amigas del barrio "a las visitas". Y mirábamos televisión por las tardes, la película argentina. Era un opio la vida. Lo mejor era la escuela.
El problema es la ciudad, que siempre fue una porquería. Y el asunto de la plata es otro. Si te vas a un country, le das una vida a tus hijos plena de pileta y bicicleta, comés asado cuando se te canta, y encima te vas a la ciudad por la autopista.
En la ciudad nos quedamos los tirados.

Anónimo dijo...

El problema está en esa idea de que "antes todo era mejor". Yo a veces siento eso, incluso en épocas en que todo era una mierda. Pero para mí era mejor porque había muchas cosas que estaban por descubrir, cosas muy buenas y agradables. La cabeza tiende a olvidar lo malo evidentemente, porque cuando uno se esfuerza un poquito recuerda que no todo era tan bueno.

La idea de que un chico frente a una "PC" es mucho peor que un pibe de hace 30 años omite que hace 30 años el pibe pasaba varias horas frente al televisor... ¿cuánta diferencia hay? Una: creo que una computadora es un instrumento mucho mas creativo y constructivo, permite la comunicación en varias direcciones.

Los pibes manejan otras herramientas, no falta el enamorado de la regla de cálculo, avísenles que ya existe la calculadora y que "antes" en un colegio secundario no se veían derivadas o integrales ni en joda. Hay que entender que los tiempos cambian, eso no necesariamente es bueno, pero tampoco es necesariamente malo, haya aspectos positivos y negativos, creer que antes todo era mejor es ser nostálgico de la edad de piedra, porque si antes todo era mejor que mejor que antes de antes.

Saludos.

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