sábado, 24 de octubre de 2009

Colas


La cola para comprar un cuartito de ESE PAN -el único en el barrio- insumió casi 15 minutos. Los fines de semana si uno quiere comer pan de verdad debe soportar esa demora (generalmente es mucho más) La gente espera en calma, sin impacientarse como en el Súper que dice tener todo más barato. Entrás a las ocho y cuarto de la mañana y resulta que hay una sola caja habilitada, cuando vas a pagar te encontrás con tres o cuatro personas en la fila. Una sola caja habilitada y el libro de quejas que te espera como diciendo "Vení, boludo, escribite algo así te vas sintiendo que hiciste algo por la dignidad de las personas..."
La gente tampoco se queja.

¿Porqué las colas cuando son PRI VA DAS no engendran esos típicos cuchicheos que se arman en las oficinas públicas?

El maltrato en los supermercados y demás comercios u oficinas de entidades privadas es soberbio, pero nadie se queja. Todo calladitos, y cuando atinás a decir algo te miran con esa cara de nada, cara de "así es el mundo" o "en "este país" las cosas siempre serán así"





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11 comentarios:

Anónimo dijo...

Concuerdo.
Se diría, una sociedad entrenada para escupir el espejo todas las mañanas.
Policarpo Cuaresma

Sargento Barrufaldi dijo...

Si te referís al de los precios mas bajos siempre, después de varias cosas que me molestaron bastante, en el de Villa del Parque encontré varios envases de jamón cocido vencido hacía una semana. Pedí que fuera a esa góndola un supervisor, y mientras tanto evité que una pareja de ancianos se llevara uno de esos envases. El supervisor hizo retirar todo, y yo dejé una queja en el libro, con mis teléfonos y mi mail.
Jamás recibí respuesta. Desde entonces, nunca volví a comprar en esa cadena. Y eso que tengo uno a dos cuadras aquí, en Villa Teflón...

Diego F. dijo...

Uhh, las veces que habré escrito en el libro de quejas de Coto y de Plaza Vea (estos últimos son los peores LEJOS) por este tema. Pero me parece que lo único que hacen con esos libros es papel higiénico.
Saludos!

Kleine dijo...

Esta clara la solución: estaticemos los supermercados, asi todos se quejan e igualamos. ¿no?

Anónimo dijo...

Es un disparate lo que decís, de donde sacaste que la gente no putea cuando hace cola en lugares privados??

Pipi

Gerardo Fernández dijo...

Pipi: Debés ser una de las excepciones porque, la verdad, a mí en un 90 % de las ocasiones me sucede que encuentro una pasividad que asombra en las colas (dicho esto último en el mejor de los sentidos...)
Y respecto a los productos vencidos, sargent, recuerdo una promoción de bifes anchos del año pasado: compré, ponele un martes, y el miercoles cuando quice consumir, estaba re-podrida...

Nix dijo...

ahhhh ud no la conoce a superPiky [mi suegra] Su última aventura supermercadil [sábado pasado] fue a raíz del desproporcionado tamaño de la bolsa de menudos que viene en el pollo. Todo terminó [porque el gerente no le dió bolilla] con una petisa rubia zarandeando la bolsa de menudos delante de la línea de caja al grito de "nos estafan, no compren".
saludos

Francisco dijo...

La verdad es que es una muy buena pregunta. Y no se si tiene una respuesta.
Entiendo que la gente putea en las colas del estado y también en la de los servicios privatizados que, por lo menos en éste país, tienen los defectos de los dos mundos: nunca me calenté tanto como en la cola de las empresas de telefonía celular.
De todas maneras lo del estado tiene mucho de mito, mejoró bastante en los últimos años: yo descubrí que una combinación de teléfono e internet te salvan de un monton de colas (muchas reparticiones tienen una atención telefonica impecable).
Pero eso no responde porque la gente no putea tanto en el super.

Gerardo Fernández dijo...

Francisco: No sabés cuánto agradezco tu buena leche. Así como otras veces me molesto contigo, ahora debo reconocerte tu buena fe.
Generalmente en los blogs los que están en la vereda de enfrente del editor manifiestan su oposición en todo momento y en casi todos los temas, o incluso escriben sólo cuando ven una beta para filtrar el dardo.
No es tu caso, por eso debo expresarlo publicamente.

Sargento Barrufaldi dijo...

Una cosa en la que recién caigo, porque como desde hace unos meses pago todo por la compu, he dejado de padecer las colas bancarias. Y recuerdo solo dos oportunidades en las que la gente empezó a quejarse por la lentitud en la atención, haciendo palmas y diciendo cosas en voz alta. Esto sucedió en en Banco Ciudad de Llavallol y San Martín, Capital, y el Banco Nación de Maipú al 700, en Vicente López. Y se trataban de esperas infinitamente menos humillantes que, por ejemplo, las del City Bank de Avenida Santa Fé. Ahí, la gente evitaba murmurar, siquiera, como quien se cuida de decir "bomba" o "terrorista" en un aeropuerto yanqui...
No había asociado esto hasta ahora que lo marcás en este post...

Anónimo dijo...

Lo mas gracioso no es que se putee o no en lugares privados, sinó que siempre que hay que marcar defectos hay que apuntar al gobierno, nunca oí en ninguna cola jamás que alguien diga "que hijo de puta este Ricardo Cáceres". Es lógico después de todo, ni siquiera aparece en la página oficial de la Camara Argentina de Supermercados.
http://www.cas.com.ar/directorio/directorio.php

Bien entrenaditos para no joder con el poder real.

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