Para debatir sobre el INDEC

La agrupación 25 de marzo nos hizo llegar este buen documento que a continuación podemos leer
Gerardo
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ACERCA DEL INDEC
(Agrupacion "25 de Marzo")

Desde hace más de dos años el INDEC viene siendo atacado por las minorías de adentro y de afuera del Instituto, respaldadas por una enorme campaña de prensa.Pero debemos preguntarnos: ¿qué sucedió para que cuestiones metodológicas se convirtieran en la principal noticia económica a lo largo de dos años?¿Qué repentino interés por las estadísticas se despertó en la opinión pública?
En nuestro país existe una comunidad de intereses: la oposición política, los grandes multimedios, algunos institutos de investigación, pero la más lapidaria y manipuladora crítica se asienta en los intereses de aquellos sectores que tergiversan la cuestión estadística con el expreso fin de desgastar a un Gobierno Popular.
Existen críticas de buena fe que descansan en el desconocimiento técnico, o en el mero prejuicio.Pero existe una crítica más explicable: la de sectores relacionados con el capital financiero que son claramente conscientes de que se acabaron los días en los cuales tener "unos amigos" dentro de un Instituto de Estadística podía implicar grandes ganancias, ganancias que por cierto pagaba el pueblo argentino.
Cabe realizar una pregunta ¿Quiénes estamos hoy en el INDEC?La respuesta es clara: Profesionales y técnicos comprometidos con el trabajo honesto, serio y responsable.
Evidentemente el gobierno no se equivocó cuando comenzó a sospechar, hacia finales del año 2006 que en el Instituto que maneja las bases estadísticas más grandes del País, con información sensible económica y social, ocurrían cosas extrañas. Los datos de avance del IPC, por ejemplo, se conocían en el "mercado" a través de los diarios, luego el INDEC los refrendaba.
Son grandes los intereses que han sido afectados, a juzgar por la enorme ola de críticas que levantó la actual conducción del instituto. A tal punto que se tergiversa la realidad mencionando como "intervención" a la actual Directora del INDEC, cuyo nombramiento se realizó bajo el mismo formato jurídico que todas las designaciones anteriores referidas a las máxima autoridad del Instituto.
En dos años de gestión, contra los poderosos intereses que quieren impedir los cambios tanto en el indec como en el País, se han conseguido enormes avances.
Los más de mil profesionales y técnicos que desde muchos años atrás nos desempeñamos en nuestro Instituto sabemos de dónde veníamos y en qué estado estábamos cuando asumió la actual Directora del INDEC, Lic. Ana María Edwin.
Sólo por mencionar algunos programas a modo de ejemplo, la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares realizada en los años 2004 y 2005 no se había terminado de procesar. Recién en el año 2007 la actual dirección del instituto pudo terminar con ese procesamiento.
El Índice de precios al consumidor con el que se llenan la boca hablando con total desconocimiento algunos devenidos "expertos" es un paradigma de la desidia con la que durante los últimos años se había trabajado en el INDEC.
No vamos a hacer aquí una exposición detallada de los problemas que encontramos, pero sólo por citar algunos digamos: si bien en la famosa metodología del IPC se declamaba que el ámbito geográfico de aplicación del índice era el Gran Buenos Aires, enorme cantidad de variedades sólo se relevaban en la zona norte de la Capital Federal.
Por ejemplo no se tomaba el precio de la carne en Lugano, ni en Mataderos, ni en La Boca y en todo el partido de la Matanza se tomaban los precios en 2 carnicerías solamente.
Se registraban precios de variedades absolutamente no representativas del consumo de la totalidad de la población. Son famosos los casos de los viajes a Cancún, Miami y Río de Janeiro, las rosas ecuatorianas o el café en grano, entre muchísimas otras. Al caer la convertibilidad es obvio que el patrón de consumo de la población cambió, pero en el IPC no se habían dado por enterados.
Se brindaba información con mayor desagregación que la publicada, sin mediar ningún acto administrativo que lo avalara, a consultoras y empresas privadas, Clarín entre ellas.Eran las anteriores autoridades del IPC y del INDEC las que no cumplían con la metodología al no cambiar el año base del índice, no adecuar las variedades a los cambios de consumo de la población y no consultar a otros organismos nacionales con responsabilidad primaria, entre otras irregularidades.Los que aparecen como víctimas eran, en realidad, victimarios.
Qué decir sino acerca del mal llamado IPC-Nacional, que a pesar del nombre se realizaba sólo en siete provincias, y constituía un engendro metodológico impresentable que las actuales autoridades del Instituto debieron discontinuar. De manera irresponsable se presentaba como nacional un índice que en cada provincia "tenía canastas totalmente distintas que se relevaban con metodologías totalmente distintas, con especificaciones distintas y bases distintas- y al que se pretendía incorporar más provincias en etapas sucesivas" lo cual nunca se cumplió-, aunque hubiese sido metodológicamente inaceptable. Pero las mejoras que la actual conducción del INDEC está llevando a cabo no comienzan ni se acaban en el IPC.
Actualmente estamos trabajando en terminar con el funcionamiento estanco en cada área del Instituto. Ahora la distintas áreas del INDEC comparten información y discuten sobre las mejores formas de desarrollar los productos, logrando la tan mentada armonización estadística. De esta forma se logró acabar con el anterior modo de funcionamiento. Una desorganización tan organizadamente estructurada que permitía hacer negocios privados con información pública.
Respecto del importante tema del Censo Agropecuario, durante el año 2006 debieron llevarse a cabo las tareas pre-censales que permitieran realizar el operativo en 2007. En ese período NO se hizo nada. Ni siquiera se había comenzado a discutir sobre el formulario a utilizar. La actual conducción del INDEC sólo encontró como tareas pre-censales algunos contactos que se habían realizado con algunas empresas que podrían proveer computadoras de mano. Sin realizar ni siquiera una prueba, se pretendía introducir dicha tecnología en un operativo semejante de cobertura nacional. Un disparate metodológico o un negocio latente para algunos.
Esta conducción desarrolló conjuntamente con las Direcciones Provinciales de Estadística y está actualmente finalizando las tareas del CNA, a pesar de las dificultades que las patronales del campo han puesto en el camino. Y lo ha hecho con la gente del área que demostró que quería trabajar honesta y responsablemente. Qué decir del Censo Nacional Económico. Cabe enfatizar que la actual conducción ha puesto todos los esfuerzos en encausar las tareas de análisis de la información, luego de un arduo trabajo de reparación de un operativo que fue vergonzoso. Sin embargo en su momento no escuchamos ni una queja por parte de los que ahora se llenan la boca pidiendo explicaciones.
Estamos trabajando en cada una de las áreas del INDEC para mejorar los productos que por desidia o intencionalmente se habían dejado de lado. El Sistema de Índices de Precios Mayoristas tiene base 1993, lo mismo que las Cuentas Nacionales. Estamos cambiando, después de larguísimos años la base de ambos programas. El Índice de Salarios tiene base IV trimestre de 2001=100, la muestra se había caído y los salarios públicos de las provincias no se relevaban. Estamos cubriendo las 24 jurisdicciones con la Encuesta de Ocupación Hotelera, que ahora se hace en conjunto con las Direcciones Provinciales de Estadística y no contratando sin control alguno a seudo encuestadores que nunca aparecían pero igual cobraban.
En fin, el trabajo es arduo pero, mientras otros tocan la sirena llamando a insultar, desprestigiar y provocar, entre todos trabajamos para mantener al Instituto en un nivel de reconocimiento internacional, que se había perdido a manos de las anteriores gestiones.
Desde el punto de vista de la inserción internacional, el INDEC está volviendo a ocupar los lugares que le corresponden, pero ahora ya no con una actitud genuflexa sino defendiendo la posición que sirva a los intereses nacionales. Ya no decimos que sí a cualquier propuesta que sirva para que los organismos internacionales como la CEPAL o el Fondo Monetario, en connivencia con algunos de los que hoy protestan contra nosotros, hagan sus negocios.
A nosotros NO nos conmueven los dólares de contratos incompatibles con la función pública. Ahora se plantean las posiciones que se defienden con todo el rigor técnico y científico. De esa forma hemos recibido el respeto y reconocimiento del Fondo Monetario Internacional y de esa forma, también, hemos logrado que la Comisión de Estadística de las Naciones Unidas invite a nuestro país y al INDEC a las reuniones dónde se convoca sólo a los mejores organismos de estadística del mundo, dónde se deciden las políticas estadísticas que se seguirán en el futuro.
El prestigio que algunos medios de prensa locales intentan quitarnos, deformando hasta niveles poca veces visto la información que difunden sobre nuestras estadísticas, lo ganamos día a día con nuestro trabajo eficiente y responsable. Por ello tanto en el ámbito internacional como en el nacional se requiere permanentemente del INDEC.
Así, desarrollamos trabajos en conjunto con la Secretaría de Turismo de la Nación, ejecutando la Encuesta de Ocupación Hotelera y la Encuesta de Turismo Internacional, pero ahora lo hacemos de forma transparente. Junto con el ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos se desarrolló la Encuesta Nacional de Prevalencia de Sustancias Psicoactivas, cuyos resultados fueron difundidos en reuniones regionales con los Ministerios de Salud y Desarrollo Social y con las Direcciones Provinciales de Estadística en cada provincia.
También estamos trabajando en la Encuesta de Factores de Riesgo junto con la Secretaría de Deportes y el Ministerio de Salud de la Nación. Y así permanentemente nuestra experiencia, capacidad y seriedad es requerida por múltiples organismos nacionales, provinciales y municipales. Esto no sería posible si no fuera por la capacidad de trabajo que, a pesar de los golpes recibidos, mantenemos los trabajadores del INDEC. Nos acusan de falta de rigor científico los mismos que llevaron al instituto a la debacle, a los que en años no pudieron o no quisieron adecuar una metodología, a los que les era funcional el modelo neoliberal para hacer sus negocios privados, a los que no aceptan que el trabajo se debe hacer en equipo por la responsabilidad que nos cabe como empleados públicos y no por que nos pagan una prebenda financiada por el BID o el Banco Mundial.
Mientras los medios de prensa presentan como real un IPC de una consultora la cual es absolutamente falso que pertenezca a la UBA, es el INDEC el que tiene un convenio real y concreto con la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA para trabajar, entre otros temas, en el Directorio de Empresas, lo cual significará un avance sustancial en el área de las estadísticas económicas.
Es el INDEC el que tiene un convenio con la Universidad de Lomas de Zamora, casa de reconocido prestigio en el área de las comunicaciones y estudios de medio ambiente.
Es el INDEC quién está trabajando, después de años de inoperancia, en sacarle el jugo a una información tan rica y sustanciosa como la que se puede obtener de la Encuesta Nacional de Grandes Empresas y la de Grupos Económicos , con un profesional de la talla de Miguel Khavisse, de los más prestigiosos sociólogos del País.¿Por qué será que la información de ese sector, tan determinante en la política económica nacional, era cajoneada sistemáticamente por la anterior conducción del área y del Instituto?.
Es el INDEC el encargado de realizar, el año entrante un nuevo Censo Nacional de Población, Hogares y Vivienda para lo cual firmará un convenio con el Fondo de Naciones Unidas para la Población.Esta es otra razón por la que algunos ex directores del Instituto están tan ávidos de cambiar la conducción del INDEC. Ya fracasaron antes, pero quieren convertir en su negocio personal el operativo más importante que desarrolla el Instituto, que es el Censo de Población.
En definitiva, existen dos formas de encarar el fenómeno de la Estadística Pública. Algunos , durante demasiado tiempo, la consideraron como una simple forma de alimentar su propio ego -y de paso su propio estómago-, participando en infinita cantidad de seminarios nacionales e internacionales y manteniendo interminables e inconducentes discusiones de academia. Cuando los resultados de una estadística estaban listos, sólo servían como instrumento para analizar el pasado y no como herramienta indispensable para tomar decisiones.
Ese desempeño burocrático fue funcional al modelo económico neoliberal.De otro lado, la mayoría de los trabajadores que nos desempeñamos en el INDEC consideramos que la Estadística Pública debe servir para que, en el marco de un modelo de desarrollo como el que lleva a cabo el Gobierno Popular, con activa participación del Estado, se puedan tomar las mejores decisiones de Política Pública.
Así, las distintas encuestas e indicadores que elabora el INDEC deben constituirse en instrumentos que permitan a los diferentes estamentos del Estado mejorar la situación de la mayoría de la población.
De ahí que estemos orgullosos de que las estadísticas que elaboramos hayan sido útiles para que, en seis años, el Gobierno pudiera actuar para bajar la tasa de desempleo a menos del 8%, obtener el mayor crecimiento del PIB en la historia, lograr acuerdos de precios para productos de primera necesidad, obtener récord de exportaciones y de saldo en la balanza comercial, saber que Argentina es uno de los países que mayor Inversión Extranjera Directa recibió en el año 2008, redireccionar el gasto social a los sectores más vulnerables, dar la movilidad tan anhelada a los jubilados, atacar los bolsones de pobreza, entre muchos otros logros.
No nos importa la filiación política de cada uno de los que trabajamos en el Instituto. Lo importante es trabajar con firmeza, calidad y objetivos claros en pos de un proyecto nacional y popular que nos contenga a todos. Los poderosos quieren volver al pasado, en el INDEC y en el País. Sólo les interesa volver a los privilegios que tenían durante la dictadura militar y durante la vigencia del modelo neoliberal. Los trabajadores del Instituto y la inmensa mayoría del pueblo argentino tenemos memoria.
No se lo permitiremos.
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