Es cierto que la propuesta de reforma política lanzada por el gobierno en las actuales condiciones puede prestarse a engaño, pero hay que reconocer que si algo caracteriza a las patrullas opositoras es su oposición cerrada a toda iniciativa gubernamental.
Se la pasaron pidiendo reforma política y resulta que ahora no es el momento ¿En qué quedamos?
Quedamos en que las fuerzas opositoras ponen a flamear banderas cuando tienen la seguridad de que no les darán bola, entonces machacan y machacan con los temarios hasta que un buen día ¡zas! El gobierno recoge el guante y se aviene a discutir una reforma política profunda.
Naturalmente las patrullas salen como rata por tirante básicamente porque no están en condiciones de someterse ellas mismas a una reglamentación del funcionamiento de la política. Salvo el radicalismo, el resto de las fuerzas son meros amontonamientos que no tienen la menor institucionalidad interna. Han jodido con el dedo que designó a Cristina, pero nada dijeron respecto a los procesos internos que por ejemplo se llevaron a cabo para nominar a Elisa Carrió como candidata a presidenta; nada dicen sobre la institucionalidad del peronismo macrizado que entronó a De Narváez como candidato ¿Qué instancia orgánica se cumplió para esa candidatura? ¿Y Gabriela Michetti de qué elecciones internas surgió?
Joden pidiendo reforma política pero así como está la cosa están cómodos, porque no reúnen las condiciones mínimas para organizarse como fuerzas políticas con todas las de la ley.
“No es el momento”, se excusan. Ya queda claro, entonces, que el cacareo fue en vano y que la reforma política quedará arrumbada. Pero, eso sí, no bien pinten las próximas elecciones van a volver a ensordecernos con el griterío de siempre reclamando ¿sabías qué? “Una reforma política”
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3 comentarios:
Estimado Fernandez, cuando los gobiernos no saben que hacer, resurge la reforma política. Deme un poco de crédito, algo se del tema y hube y estoy trabajando en esas areas. Es un verdadero desastre, nadie tiene mayor idea de lo que quiere ni de como lograrlo, por lo que es una suerte de encimadas propuestas absolutamente descabelladas.
Pero en el ámbito de nuestra bendita ciudad de buenos aires es aún peor. El PRO quiere sacar "algo" a como de lugar y accede a todo lo que le pide el bloque del ibarrismo que, de golpe, se olvidó que gobernó diez años y no hizo nada, y sacó el manual del buen progresista y pide, y pide y pide. Y el PRO, desesparado por mostrar que hace algo, otorga, otorga y otorga.
Lo que saldrá de allí no lo se, pero lo que si se es que ningún arreglo o reingeniería institucional compone o realiza lo que la política no hace y ningún código electoral puede con las miserabilidades de un sistema político corrompido intelectualmente por el simplismo y la falta de arrojo.
Nadie quiere una reforma política Fernandez, nadie. Hace falta hombres y mujeres distintos a los que están para llevar eso adelante.
Coinicido con el liberal argentino.
En verdad, estamos en un momento muy tremendo de nustra vida política. Mas allá de que no siempre he estado de acuerdo con el gobierno de Kirchner y Kirchner, la apuesta plebiscitaria ha sido tan desmesurada, fiel al estilo K, que la derrota le es proporcional. Hasta donde sé, por allegados que trabajan de asesores en la bancada oficial y en la bancada PRO, hay un clima de desconcierto abrumador. Nadie sabe verdadermanete como sigue esto, porque se ha perdido todo plan. Nótese que aquellos argumentos como "redistribución", "inclusión social", etc, se han dejado de utilizar, basicamente porque todo el esfuerzo esta puesto en apuntalar una estructuta colapsada en la que la mayoría de los jugadores se estan reubicando, es decir, se estan yendo a componer otra estructura. Se sospecha de Duhalde. Puede ser. Pero tampoco está acumulando tanto poder. Kirchner esta verdaderamente solo.
Y eso es muy preocupante, porque queda demasiadoo tiempo de mandato para estar en el tramo de mayor debilidad, y sin demasiadas posibilidades concretas de fortificacion. Ha logrado que cualquier medida sea sospachada. Ha dejado de ser creíble, lo cual puede ser una bomba de tiempo para toda la sociedad.
El destino politico argentino, pareciera no poder salir de una trágica rueda de endiodamientos y fracasos sistemáticos. Le está tocando el turno a Kirchner y no es inaudito preveer lo peor.
Ojalá me equivoque, ojalá la historia no se repita.
Liberal:
"Hace falta hombres y mujeres distintos a los que están"
Si mi abuela tuviera barba y se llamara Pedro, sería mi abuelo.
Uno de los problemas de la política es que hay que construir con lo que hay, y lo que hay pocas veces coincide con lo que nos gustaría que hubiese.
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