lunes, 15 de junio de 2009

La polarización es con Clarín


Como era de esperar y como lo planteamos ayer acá, Clarín lanzó una operación de prensa de una magnitud y una potencia pocas veces vista.
El objetivo es puntual: Instalar la noción de que el gobierno está nervioso porque pierde las elecciones.
Están operando para llevar votos indecisos a De Narváez y desalentar el voto al Acuerdo Cívico.
Se vuelve a ratificar que estas elecciones enfrentan al gobierno con Clarín, que esa es la puja de fondo, el resto es cotillón.
Se pondrá en juego quizá por primera vez el poder de penetración real de los medios en la sociedad. En la confrontación por la 125 se comprobó que las clases medias respondieron de manera mecánica a las convocatorias mediáticas. Incluso en 2001 fueron también las cacerolas empuñadas mayoritariamente por gente linda las que escuchamos sonar.
Ahora la cosa es distinta, es más amplia y atraviesa a toda la sociedad y es ahí donde los diversos sectores sociales tienen que optar por ratificar la gestión del gobierno nacional o manifestar que el país que propone Clarín es más apetecible.
Esa es la verdadera polarización.
La puja se está dando por un retorno a lo conocido, al ajuste, a "las reformas pendientes", a la "modernización de la economía" y demás sarasas que ya padecimos o un proyecto como el que viene desde 2003 que con sus vicios y virtudes, con muchas cosas por mejorar y corregir viene dando respuesta en términos de empleo, de inclusión y de colocar a la Argentina junto a los países de la región, que es la única vía para entrar en un ciclo de crecimiento sólido.
El capitalismo central sigue aún a los tumbos con cifras de desempleo feroces y acá, si bien se siente el cimbronazo, los efectos de la crisis mundial están más que atenuados por una gestión gubernamental que presiona a los empresarios para que pongan algo de lo muchísimo que ganaron en años anteriores para evitar la ola de despidos. Por eso, entre otras cosas, salta la UIA, porque fieles a su instinto los hombres de empresa no saben de solidaridad. Cuando hay mucha ganancia se la guardan y cuando viene el parate se hacen los boludos.
Una forma de ser conocida por el pueblo trabajador.
Todas estas cosas se ponen en juego el 28 de junio y Clarín tiene muy claro que la gente sabe con quién perdió el trabajo y con quién lo recuperó. Por eso no va a ese sector. Apunta sus cañones a ciertos sectores medios de esos que creen que si les va bien es por mérito propio. A esos que piensan que sus ingresos han crecido porque son re-vivos y la tienen re pero re-clara.
Ahí está buscando votos el multimedio.

2 comentarios:

Santi dijo...

gerardo: llegue a tu blog x sugerencia de un companero, q te conoce de hace mucho: Pablo Raimo.
Leo siempre tus posts, y no solo me resultan mas q interesantes, sino q los comparto casi al 100%.

Te mando saludos
Santiago Pousadela

Anónimo dijo...

También, adhiero totalmente con el contenido del post.
Espero que los sectores medios, a los que pertenezco, esten más indignados que estupidizados. La matraca, el bomabardeo y el clarinete van ser más que estridentes estas dos últimas semanas.
Es probable, lo espero, que ese desborde juegue en su contra.

juan

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