La Nación intenta mostrar una Cristina crispada cuando en verdad la presidenta no hizo más que repetir la visión política que viene manifestando desde hace años. El tema acá es que siempre que el gobierno nacional asume posturas de dignidad ante los poderes extranjeros La Nación cae automáticamente en ese lugar cipayo que es su sino.
Para La Nación estas definiciones son "un ataque":
"En un mundo que se derrumba, pretendían darnos lecciones y condicionarnos. Aún hoy, en medio del fracaso más estrepitoso del que se tenga memoria en las últimas décadas, los responsables directos de ese fracaso en 2001 en la Argentina, pero también en Europa y en Estados Unidos pretenden seguir dándole al mundo la misma medicina que nos dieron durante una década para arruinarnos. No se entiende tanta necedad, tanta terquedad"
"¿Cómo es posible que se pretenda que a través de un ajuste va a venir el crecimiento? Es un contrasentido. Mil y una vez lo explicamos en los foros internacionales. Por suerte, esta Presidenta no hace caso a los que nos decían que debíamos enfriar la economía en 2007"
Por suerte, ahora quien crea sentido es Cristina y no el diario de los Mitre.
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2 comentarios:
La Nación solo subraya una contradicción en el discurso, o mejor dicho entre el discurso y la realidad: al tiempo que acusa al FMI de terco y crítica sus críticas al INDEC (a esta altura, indefendible), pide un acercamiento.
Coincido, de todos modos, que la receta del FMI para Grecia en el 2011 es parecida a la de Argentina en el 2001 y que va condenada al mismo fracaso.
Pero Grecia 2011 no es lo mismo que Argentina 2007 (o 2011). Y pedir que se controle la inflación (que Cris dice que no existe) no es pedir un ajuste a lo Lopez Murphy.
Y si, para La Nacion (sin acento, tal como lo escriben ellos), la actitud presidencial es un ataque A SUS INTERESES
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