sábado, 9 de octubre de 2010

Qué es gobernar, compañero Lula?



A menudo digo que la gran diferencia con, por caso, Proyecto Sur, es que estos amigos no gobiernan ni una insignificante comuna, entonces no tienen la más mínima idea de qué es la gestión, aunque a pesar de todo  hablan y gesticulan como si fueran expertos en la acción de gobierno.Digo también a menudo que los únicos rastros que se pueden encontrar hasta el presente en materia de gestión por parte de esta fuerza hay que buscarlos en la esfera parlamentaria. Ahí podemos ver que cuando tuvieron que tomar partido, cuando de alguna manera tuvieron que gestionar e incidir sobre la realidad lo hicieron a los tumbos ya que mientras por ejemplo Claudio Lozano y la bancada del SI votaba en contra de la 125, las chicas de Libres del Sur y Miguel Bonasso lo hicieron a favor de la "polémica" resolución. Luego votaron la ley de medios junto al socialismo pero al mismo tiempo han sido parte constitutiva del Grupo A desde el 3 de diciembre del año pasado participando activamente en la rapiña de comisiones y contratos.

Todo esto me lleva muchas veces a desear que al menos ganen alguna intendencia para verlos actuar, para comprobar en la cancha cómo son estos pingos. Digo esto porque me he referido hasta el cansancio a que termina siendo empalagosa la sobreabundancia de los "hay que" manifestados permanentemente por dirigentes y legisladores que nunca han tenido que lidiar con las exigencias concretas de la gestión. Gobernar es gestionar, es tener que decidir minuto a minuto e incluso muchas veces tomar decisiones que no son las que más te gustan pero al mismo tiempo son las más conducentes o eficaces en un situación dada. Gobernar es dar testimonio con cada medida y hasta con cada inacción. La acción de gobierno desnuda definitivamente a la fuerza política y la muestra tal como es sin maquillajes, peinados o vestimentas que produzcan una imagen ficticia de lo que en verdad se es. Por eso muchas veces hasta me permito dudar del verdadero interés que en el fondo tienen algunas fuerzas políticas en ganar elecciones porque ello presupone lo peor: Tener que hacerse cargo y gobernar... (De este drama, aunque desde un andarivel ideológico distinto puede dar fe la muchachada del PRO)

Mucho de esto está expresado con sabiduría por el presidente Lula  en esta respuesta que le dio a Martín Granovsky para el diario Página/12 que la publicó el domingo pasado:


–¿Qué aprendió en casi ocho años de Presidencia? ¿Qué entiende hoy mejor que antes? ¿Qué diferencia tiene el Lula de hoy con el que asumió el 1º de enero de 2003?
–En la Presidencia lo primero que aprendemos es a gobernar. Cuando uno llega a la presidencia de la República normalmente antes estuvo muchos años en la oposición. Cuando iba un debate o a una reunión yo les decía a mis interlocutores: “Me parece”, “pienso”, “creo...”. En el Gobierno uno no piensa que, a uno no le parece que, uno no cree que. O hace, o no hace. Gobernar es una eterna toma de decisiones. Uno aprende a ser más tolerante y a consolidar la práctica democrática. La convivencia política en la adversidad es una enseñanza estupenda para quien cree en la democracia como un valor supremo dentro del arte de hacer política. Y eso lo aprendemos ejercitándolo todo el santo día. No creo que haya una universidad capaz de enseñarle a alguien a hacer política, a tomar decisiones. Uno puede teorizar, pero entre la teoría y la práctica hay una enorme diferencia diaria. Tomemos, por ejemplo, mi segundo mandato, que empezó en el 2007. Todo el mundo sabe que yo le tenía miedo a ese segundo mandato presidencial. Tenía miedo del agotamiento, de la chatura, de repetir todo. Pero cuando lanzamos el PAC, el Programa de Aceleración del Crecimiento, la verdad es que hicimos un transplante de todos los órganos vitales del Gobierno y creamos un gobierno nuevo, más productivo, mucho más eficaz, más activo. Eso es lo que tenemos hoy en funcionamiento. Para mí ése fue un gran aprendizaje. Tanto que no quiero olvidarlo cuando deje la Presidencia. Preciso continuar aprendiendo. Pasar por la Presidencia, enfrentar las adversidades que enfrentamos nosotros y llegar al final del segundo mandato con esta buena situación de hoy es algo que logramos porque practicamos intensamente el ejercicio democrático. Convocamos a 72 audiencias nacionales sobre todos los temas, desde la seguridad pública a la comunicación, pasando por la discapacidad. Todas las políticas que implementamos fueron resultado de audiencias. El pueblo participó activamente de las decisiones y de las políticas públicas. Ese es el cambio fundamental. Cuando llegué, en 2003, en el Ministerio de Transportes se gastaban mil millones de reales por año. Hoy gastamos 1,6 mil millones de reales por mes. O sea que aprendimos a gastar y aprendimos a hacer obras.


El reportaje completo, acá.

4 comentarios:

Milton Paz dijo...

Lula es un orgullo para latinoamérica.Lo que me parece increíble es que algunos medios reivindican la tarea de lula(reconocido hombre de izquierda)y defenestran al gobierno nacional cuando timidamente trata de implementar una decisión medianamente popular como la 125 en su momento o la ley de medios ahora.
saludos che muy bueno el blog

Juan Carlos Petella dijo...

hay que decirle a Granovsky que se las pase al matrimonio, así la leen.

ram dijo...

Comentarios como el anterior, certifican eso de que como con la rata riojana era fácil ser progre, también es fácil ser progre, de izquierda, puro e inmaculado, sin gestión, sin compromiso, de lejitos y refugiado en frases "matadoras".
Es, por lo menos pavo, mandar a leer al "matrimonio", una nota hecha a un tipo con el que tuvieron y tienen muchas horas de vuelo en sus gestiones, de coincidencias concretas y de trato personal. ¿Qué van a leer en una nota, ...que no tengan ya conversado? Lula, ¿qué va a decir en una nota que no tenga "consensuado con el matrimonio"? Lula es gil, Lula habla como una vecina que barre la vereda?
Pero Lula es un ejemplo de lo "bueno" y por acá todo es "malo". Por eso, porque todo es malo y se hizo mal, es que aparecen comentarios y comentaristas facilongos, que tienen la precisa, descubren el aujero del mate y padecen la más fenomenal amnesia respecto a de dónde viene la Argentina, de qué clase de situaciones políticas, económicas partió este gobierno.
Esta gente, "el matrimonio", agarró todo bien y funcionando, la felicidad era dueña de las calles argentinas y los muy bestias arruinaron todo, nos hicieron caer del mundo y ya no vemos ni una lucecita al final del túnel - ni eso, porque también nos quedamos sin luz, sin gas, sin pan, sin bifes, sin nada, bah!
Criticar es fácil, criticar sin proponer es mucho más fácil, criticar lo que otros pícaros nos dicen que critiquemos es obscenamente fácil, no solo estará la crítica sino que además y "generosamente" nos la amplificarán.
En una de ésas, al "matrimonio" le venga bien leer la nota a Lula, después de todo es un amigo - pero lo que sería más buenoi es si todos esos opositores a todo y la bandada de loros repetidores que los engalanan; escribieran alguna vez, alguna propuesta, alguna idea, algo....; algo que les venga sin instrucciones "magnéticas" o en inglés. Alguna vez, seguramente pido mucho.

Daniel dijo...

Por ejemplo, esto puede marcarse decididamente en el gran canje que hizo Kirchner en el 2005 (completado éste año). Hay gente que debe creer que fue un trámite. Solo allí podemos ver lo que es gestionar y como estar a mil años luz de quienes tiran verdura todo el tiempo pero que no accedieron siquiera a la Intendencia de Resitencia.
Porque será que en momentos de contar con mucho respaldo en votos, a Lilita ni se le cruzó la idea de gobernar el Chaco?
Por algo le escapan al tema.

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